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La proclamación y el período constituyente

El último gobierno de la monarquía, presidido por el almirante Aznar, convocó elecciones municipales para el 12 de abril de 1931, con el fin de llevar a cabo su proyecto de retorno gradual a una normalidad constitucional. La oposición las planteó como un plebiscito a favor de la monarquía o la república. A pesar del fraude electoral, las candidaturas republicano-socialistas triunfaron en 41 de las 50 capitales de provincia y en las ciudades más importantes. Ante estos resultados y como consecuencia de una mala gestión política de la monarquía, incapaz de afrontar los graves problemas que el Estado arrastraba desde el S.XIX y por haber apoyado la dictadura de Miguel Primo de Rivera, el rey Alfonso XIII se exilió, proclamándose así la República el 14 de abril de 1931. Niceto Alcalá-Zamora, en nombre del Comité Revolucionario, constituyó un Gobierno Provisional formado por republicanos, socialistas y nacionalistas. El Gobierno Provisional convocó elecciones constituyentes  e inició una se
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El bienio progresista

Tras la aprobación de la Constitución y la elección del conservador Niceto Alcalá-Zamora como presidente de la República, Manuel Azaña presidió hasta 1933 el gobierno de coalición entre republicanos de izquierdas y socialistas, sin participación de los radicales. La coyuntura internacional El contexto internacional no favoreció la estabilización del nuevo régimen, ya que la década de 1930 se vio afectada por una profunda crisis económica y el auge de los regímenes políticos autoritarios. En Europa empezaba a notarse los efectos de la crisis económica mundial que se había iniciado en 1929 con la caída de la Bolsa de Nueva York. Esta crisis tuvo menor incidencia en España debido al atraso económico, pero contribuyó a desestabilizar la economía y la sociedad.  El comercio exterior y las inversiones extranjeras fueron las actividades más afectadas por la crisis, la cual incidió en el incremento del desempleo. El paro fue el factor que contribuyó en mayor grado a agudizar las tensiones soci

El bienio conservador

En las elecciones de 1933, la CEDA de Gil-Robles fue el partido más votado pero no obtuvo mayoría absoluta. El partido radical de Alejandro Lerroux se convirtió en la segunda fuerza política de las nuevas Cortes. Entre octubre de 1933 y octubre de 1934 se sucedieron varios gobiernos en minoría presididos por los radicales A. Lerroux y R. Samper a causa de la negativa del presidente de la República, Alcalá Zamora, de entregar el poder al partido más votado, la CEDA, que no reconocía la República. Aunque la CEDA no formó parte de estos gobiernos, los radicales dependían del apoyo parlamentario de los seguidores de Gil-Robles.  Estos gobiernos radicales mantuvieron una actuación moderada hasta la entrada de la CEDA en el gobierno en octubre de 1934. A partir de ese momento, se inició un período de gobierno en coalición de los radicales y las derechas. Este bienio radical-cedista se caracterizó por el conservadurismo político y la anulación de la reformas sociales, económicas y autonómicas

El Gobierno frentepopulista

Ante la convocatoria de elecciones, los republicanos de centro-izquierda, los socialistas y los comunistas del PCE y del POUM suscribieron un pacto en enero de 1936 por el que constituyeron el Frente Popular, con el objetivo de presentarse unidos a los comicios para defender la continuación de las reformas del primer bienio. Por el contrario, la derecha tuvo dificultades para unirse en un frente antirrevolucionario a causa de las querellas internas entre la CEDA y la extrema derecha. El Frente Popular obtuvo la mayoría en Cataluña, las regiones industriales y las zonas latifundistas del sur. La derecha aumentó su representación, pero como la ley electoral beneficiaba a las coaliciones, el ajustado resultado se convirtió en una amplia mayoría del Frente Popular en las Cortes. Resultado elecciones generales febrero de 1936. Los resultados electorales desataron una euforia popular y Portela presentó su dimisión, por lo que Alcalá-Zamora nombró a Manuel Azaña presidente del gobierno. El nu